lunes, 5 de octubre de 2015

Democracia electoral o Dictadura partidista.

“Toda dictadura, sea de un hombre o de un partido, desemboca en las dos formas predilectas de la esquizofrenia: el monólogo y el mausoleo.” Octavio Paz (1914-1988). Premio Nóbel.
Democracia electoral o Dictadura partidista.



Desde los tiempos cuando en la Antigua Grecia, se pudo ver Asambleas Populares, en las que los ciudadanos ejercían la soberanía absoluta sobre las cuestiones sociales; hasta la actualidad, en nuestro tiempo, donde gracias al voto que se ejerce de manera independiente; la Democracia ha sido un símbolo de liberación de los pueblos. Una rápida revisión a los libros de historia, permiten demostrar como ese pueblo (demos), desarrollo, gracias a su sociedad y a pensadores como Platón, Aristóteles y Clistenes el poder (krátos), para lograr esa autodeterminación, que hoy en día todos los ciudadanos hemos reconocido como propia y necesaria en todos los ámbitos del convivir.

Por otro lado también, no es desconocido del poder dictatorial, en donde se concentran los poderes de decisión en una sola persona o a su vez en un grupo elitesco de cómplices, que participan en conjunto para el ejercicio descarado y arbitrario del mando en beneficio de las minorías que protegen. De igual modo es posible rastrear estas prácticas a la antigua Roma, con personajes como Tito Larcio quien fue el primer dictador Romano.  

Ahora bien, dejando atrás a estos filosos y al dictador, es interesante hacer paralelismos, con la actualidad en la que vivimos, pero desde la vertiente electoral, para delimitar el contexto sobre el cual vamos a revisar.

Si bien la cultura democrática de Venezuela, ha permeado a todos los niveles de la sociedad, no es extraño ver como quienes rasgan sus vestiduras en defensa de la democracia, coquetean con practicas dictatoriales, tratando de disfrazar en su discurso, prácticas autoritarias, totalitarias y fascistas.

Nuestro país, próximo a unas elecciones para escoger a Diputados y Diputadas a la Asamblea Nacional, puede ser un ejemplo claro de estas prácticas típicas de dictaduras, que son tan criticadas a nivel internacional, y es importante decir, que al hablar de dictaduras no hablo precisamente del sistema de Gobierno, ya que las malas prácticas, parece que son más fáciles de copiar, en esta oportunidad me refiero a las practicas dictatoriales dentro de los partidos políticos, que hacen vida en el ajedrez venezolano.

Está de moda en los partidos llamados democráticos, la imposición, la dictadura, la arbitrariedad para favorecer a sus grupos, hoy las dos corrientes que polarizan el sistema político-electoral de Venezuela, califican a muchos ciudadanos, de disidentes, tildándolos de divisionistas y traidores, por el simple hecho de brindarle al electorado la posibilidad de votar por una alternativa distinta a la de la izquierda gobernante y la de la derecha sin propuestas. Estas nuevas coyunturas han dado paso a que nuevas propuestas electorales se pongan al alcance de los ciudadanos, para tratar al fin de romper ese yugo tendencial de Rojos y Azules (aunque dentro estén decolorados).

Luego de esto surgen solo estas preguntas: ¿Dictadura de imposición y obligatoriedad de dogmas políticos elitescos? o ¿Democracia y libertad de elegir sin presiones?. En la respuesta a estas preguntas está la clave para un sistema más justo, bañado de equidad y valores para la gobernabilidad de Venezuela. Por lo cual es importante dejar de colocar un Color, y dedicarnos más bien a identificar el Valor, que estos ciudadanos han tenido para ofrecer una opción independiente al electorado nacional. No nos dejemos guiar al monologo ni al mausoleo.
Carlos Gabriel Martínez Uzcátegui
Docente Universitario / Articulista.
@CMartinezLags